Posts Tagged ‘Linux’

Linux: Mendeley is feeling very poorly at the moment. Solución

9 julio, 2020

Utilizo desde hace varios meses Mendeley tanto en Debian como en Ubuntu. Hace algunos días al intentar abrirlo me apareció el siguiente mensaje: Mendeley is feeling very poorly at the moment. You may wish to contact the doctors at support@mendeley.com for help. Escribí a dicha dirección y no hubo respuesta satisfactoria. Estuve buscando la solución a través de dicho mensaje de error, pero no encontré nada que sirviera.

Finalmente, inicié Mendeley desde la terminal y al buscar respecto al mensaje de error que ahí me daba la solución fue la siguiente:

$ mendeleydesktop --reset

Nos sale un pequeño cuadro de diálogo con una caja de texto en la que debemos incluir lo que nos indica:

i want to delete all my data

Y problema solucionado. Espero que sirva.

Convertir videos de VCD en a MPG en Debian

16 marzo, 2016

Hoy quería editar un video de VCD para insertarlo en una presentación de diapositivas, lo cual desde el CD resultaba imposible, y en Linux tampoco es posible reproducir de manera independiente los archivos .dat.

Así que me di a la tarea de buscar la forma de extraer los videos del disco con otro formato y me encontré con la solución, muy sencilla por cierto.

  1. Insertamos el CD de Video o VCD en la unidad lectora de nuestra computadora.
  2. Instalamos vcdimage. Este programa lo encontramos en los repositorios de nuestro Debian.
    apt-get install vcdimager
  3. En una terminal, ejecutamos el siguiente comando
    vcdxrip

Listo. Los videos del VCD estarán disponibles en el directorio de usuario en formato mpg, con lo cual ya los podemos reproducir más fácilmente, aislar, editar, subir a la red….

NOTA: Este procedimiento lo hice en debian 8, «Jessie».

Iniciar desde cd e instalar Linux en HP Notebook 15 (Eliminar Windows y el molesto arranque seguro)

25 octubre, 2015

Hace unos días, después de tantos años de no cambiar de equipo, me hice de una Laptop HP con el modelo que nombro en el título. Me costó un poco de trabajo encontrar la manera de iniciarla desde el cd para poder deshacerme del Molesto Windows 8.1.

En primer lugar instalé Ubuntu junto con Windows, sólo porque tenía curiosidad de ver como era esa instalación «compartida». Pero aún habiendo instalado Ubuntu junto a Windows, el arranque seguro del sistema no me dejaba seleccionar con cuál de los dos sistemas iba a iniciar, es decir, grub no me aparecía, a pesar de haberse instalado, y al iniciar se pasaba directito al Windows de la muerte.

Pero bueno, al final lo conseguí, y aquí les diré como por si alguien más se encuentra con esta dificultad, ya que en mi caso, encontraba guías para otros modelos, pero la solución fue distinta a esos otros ejemplos.

Primero, para iniciar desde CD, hay que acceder dentro de Windows a la Configuración del PC, entrar a Actualizar y Recuperar/Recuperación/Reiniciar Ahora.

Ahí es donde tendremos la opción de iniciarla desde CD o bien desde USB, para poder instalar nuestra distro favorita de Linux. Para ello como hemos de saber, al dar click en la opción deseada, ya ha de estar el CD o USB booteable en el dispositivo de entrada.

tutoria2

De ahí en adelante, todo normal, hay que instalar el sistema. Si eliminamos por completo Windows y sólo dejamos el nuevo sistema, no habrá mayor problema, pero si hacemos una instalación compartida con Windows, al reiniciar, el Windows seguirá iniciando sin preguntarnos por nuestro otro sistema.

Haremos lo siguiente para remediarlo:

Entramos a la configuración del BIOS: ESC al prender el equipo, y F10.

Ahí nos moveremos a System Configuration, y en UEFI Boot Order, damos entrar y seleccionamos el inicio de nuestro sistema Linux, y entonces, cuando reiniciemos, aparecerá la versión de grub instalada junto a nuestro Linux, preguntando, en qué sistema deseamos iniciar.

En mi caso, después eliminé Windows por completo e instalé Debian, mi favorito, por lo que puedo elegir entre la versión de Grub que tiene Debian o la de Ubuntu, pero cualquiera de las dos me permite seleccionar con cuál iniciar, lo cuál resulta imposible con el arranque seguro de Windows.

DSC02489PD: Microsoft, Windows y el software privativo, no nos obligarán a quedarnos con su inservible software.

Resolver interferencia de Skype con Rhythmbox en Debian

13 noviembre, 2014

Resulta que al instalar Skype en debian y hacerlo funcionar correctamente, aún hay otro problemilla que a mi me apareció. El problema era que cuando estaba escuchando mi música a través de Rhythmbox y se me ocurría abrir skype e iniciar mi sesión, se detenía la reproducción de música y había que dar de nuevo en reproducir para que la canción continuara. Lo mismo sucedía al enviar o recibir un mensaje en el chat y también con cualquier otra notificación del Skype.

Aunque desmarcara la opción que Skype trae en Opciones/Dispositivos de sonido, la cual dice «Permitir que skype ajuste automáticamente mis niveles de mezclado» el problema no se resolvía.

Buscando un poco por la red, encontré lo que me solucionó el problema en el siguiente link: https://wiki.archlinux.org/index.php/Skype#Skype_sounds_stops_media_player_or_other_sound_sources

Las soluciónes son:

1.

# nano /etc/pulse/default.pa

Ahí, buscar la linea «load-module module-role-cork» y comentarla, para que quede así:

# load-module module-role-cork

2.

# nano /etc/pulse/daemon.conf

Buscar la linea «flat-volumes = yes» y cambiarle el valor por «no». Quedaría así:

flat-volumes = no

3.

En una terminar de usuario correr lo siguiente:

$ pactl unload-module module-role-cork

Para probar cada solución, habrá que reiniciar el sistema.


Resolver problemas de audio en debian Wheezy con Intel Corporation NM10/ICH7

11 May, 2013

Hace unos días que se liberó Wheezy e instalé la nueva versión, entre uno de los pequeños inconvenientes que tuve fue que me quedaba sin sonido después de reiniciar por primera vez después de instalar el nuevo sistema.

La solución como siempre la encontré buscando por la red posibles soluciones. Dejo aquí el proceso que seguí por si hay alguien más con el mismo problema:

1. Editar «/etc/modprobe.d/alsa-base.conf»

# nano /etc/modprobe.d/alsa-base.conf

al final del documento agregamos la siguiente linea:

options snd_hda_intel model=3stack-6ch-dig

2.  Editamos también el documento /etc/pulse/daemon.conf
# gksu gedit /etc/pulse/daemon.conf

Buscamos la linea  «; default-sample-channels = 2»

Y le quitamos el ; además de cambiar el valor 2 por 6

Debe de quedar así: default-sample-channels = 6

3. Reiniciamos el sistema.

4. Reconfiguramos alsamixer

# alsamixer

Presionamos F6 para elegir nuestra tarjeta de sonido

Captura de pantalla de 2013-05-11 23:57:43

Nos movemos con la flechas de dirección hasta la opción Channel y le cambiamos el valor de 2ch por 6ch.

Captura de pantalla de 2013-05-11 23:59:23

Ya sólo queda ajustar los niveles de  las demás opciones. En mi caso sólo tuve que bajar el nivel de Front Mic un poco para que el sonido quedara con la mejor calidad.

Captura de pantalla de 2013-05-12 00:04:54

Salimos con Esc.

Y ya hay sonido en Wheezy.

 

Las tecnologías de la información como el método más eficaz de control humano y las alternativas comunitarias que mantienen la libertad de usuario

26 marzo, 2013

“Nada nos libera tanto como la tecnología. Nada nos esclaviza tanto como la tecnología”1. Así da inicio Naief a la introducción de su obra Tecnocultura, y un par de párrafos más adelante dice: “la tecnología puede ser considerada como una autopista hacia la realización completa del ser humano o como un laberinto de espejos”2. Contrastantes declaraciones, pero interesantes de analizar. Hoy en día vemos que nuestras sociedades se guían por el desarrollado avance tecnológico que los científicos han llevado bastante lejos. Al día de hoy, es difícil pensar nuestra vida sin tecnología. Qué sería de muchos de nosotros sin una computadora, sin un teléfono móvil, sin una cámara digital, sin redes inalámbricas en donde podamos conectar todos esos artefactos a la vez.

Hemos nacido en un mundo tecnologizado a tal grado que, llegamos a creer (en especial las más jóvenes generaciones) que todos estos dispositivos tecnológicos que nos rodean son inherentes a nuestra vida, que son necesarios y que nunca deben faltarnos. Un simple celular, el cual su función principal es comunicarse, hoy nos puede servir para una infinidad de cosas, además de hacer llamadas, enviar mensajes de texto, tomar fotos, videos, llevar nuestra música favorita a todas partes, agendar nuestras actividades, recibir noticias, hacer cálculos matemáticos, etc. Un montón de artefactos en uno solo. ¿Cuándo nuestros abuelos, e incluso nuestros padres se imaginaron esto hace algunas décadas?

Lo destacable aquí es que, nuestras vidas parecen depender de la tecnología, ya que hacemos uso de ella para tantas actividades, consecuencia del mismo hecho de que en ella encontramos tantas herramientas «útiles». Para muchos, olvidar el celular es sentirse frustrados a cada momento, pues atrapa al individuo una especie de terror, a la incomunicación, a estar desinformado de lo que pasa en el mundo, a no poder captar aquellos momentos tan importantes… Nuestros artefactos nos facilitan y nos brindan tanta comodidad en nuestra vida diaria que, nos hemos acostumbrado tanto a ellos que cuando nos faltan nos sentimos incompletos.

Es entonces cuando las palabras de Naief toman sentido, pues mientras por un lado la tecnología nos libera, pues nos ahorra mucho trabajo que tendríamos que hacer manualmente y con más dedicación a cada momento, nos evita tantas fatigas, tanto tiempo, nos facilita lo que hacemos en cada momento, por el otro, parece que de la misma manera nos esclaviza, pues de alguna manera nos sentimos sus siervos, ya que sin ella creemos no poder vivir, sin ella sentimos no poder avanzar, no poder realizarnos, no poder trabajar, e incluso, no poder entretenernos. Y por esa paradoja podemos llegar al otro par de afirmaciones, la tecnología ciertamente puede ser considerada como una autopista hacia la realización del ser humano, ya que ella nos permite realizar nuestros trabajos con más facilidad, con más rapidez y con más precisión, entre otras ventajas, acelerando y mejorando de esa manera nuestras producciones y nuestra calidad de vida; sin embargo, esta situación puede verse también como un laberinto de espejos, ya que abusar de ella está generando un cúmulo de perjuicios no sólo al género humano, sino a toda la vida que existe sobre la tierra y a la naturaleza entera. Dependemos de la tecnología, y por conseguirla nos esclavizamos solos, y esclavizamos a otros. Además, explotamos a la naturaleza, la exprimimos con tal de generar mejores tecnologías, y con esas mejores tecnologías, intensificamos la explotación y el dominio sobre todo, vidas y cosas.

Pero casi nadie se da cuenta de las graves implicaciones que tiene abusar del uso de todos los inventos que la ciencia nos proporciona. En general, los individuos piensan que la tecnología es lo mejor que nos puede suceder, y apoyan a cada instante su desarrollo. Se espera con emoción la salida de nuevas versiones y/o modelos de nuestros artefactos o programas favoritos, pues soñamos constantemente con esas nuevas funciones que tendrán, esas nuevas comodidades que nos traerán; lo que pocos se detienen a analizar es, las implicaciones de todas esas novedades, el impacto que tendrá en la sociedad y en la naturaleza.

Pero analicemos semejante situación con más detenimiento. ¿Qué es en esencia la tecnología? Según la definición de Naief, “es una colección de instrumentos inanimados para fines específicos”3. Sin embargo como he mostrado anteriormente con el ejemplo del celular, un solo artefacto puede tener múltiples fines. En ese sentido podemos retomar las palabras de Naief, cuando asegura que “la tecnología ha demostrado ser expansiva, mutable y en ciertos casos parecería una fuerza con vida propia, capaz de engendrar fenómenos inesperados”4, ya que cuando tenemos un artefacto, buscamos generalmente aquel que tenga el mayor número de funciones, el que nos pueda resolver el mayor número de «necesidades», por lo que después, se nos hace la vida casi irrealizable si nuestro artefacto nos hace falta, pues nos saca de tantos problemas y apuros que resulta indispensable para nuestras actividades diarias, ya que la tecnología ha penetrado en todos los ámbitos de la vida, incluso para actividades sencillas de realizar manualmente.

En ese caso, resulta más convincente y certera la segunda definición que el Naief brinda:

“La tecnología es también un proceso que ha logrado penetrar en todos los ámbitos de la vida y la cultura, adquiriendo enorme complejidad, volviéndose un fenómeno aparentemente autónomo y fuera de control, que se rige con una lógica de sustitución compulsiva de productos y de consumo voraz”5

Cuando el uso de la tecnología alcanza ese nivel de esencia en una sociedad, es cuando podemos decir que pareciera una fuerza con vida propia, ya que domina en cada una de las actividades sociales e impone en cierta forma maneras de vida, pues los individuos y grupos de individuos se adecuan a vivir con ella de manera dependiente a su uso y adquisición, a lo que el profesor de la universidad de Notre Dame, R. L. Rutsty señala que es una tecnocultura6.

Pero la situación va más lejos, ya que, “la relación que podemos establecer con un teléfono celular, una computadora, un auto o una televisión de plasma no puede considerarse meramente utilitaria, sino que va más allá, aproximándose al tipo de emociones que invertimos en nuestros seres queridos”7. Muchas veces tenemos un interés en nuestros objetos que va más allá del utilitario, es decir, nos podemos encadenar a él no simplemente por aquellas necesidades nuestras que va a cubrir, sino que estimamos su posesión por sí misma.

Al parecer lo que nos ha orillado tanto al uso excesivo de la tecnología ha sido que, desde sus inicios justamente nos sirvió para facilitarnos ciertas actividades, de una manera adoptarla como una herramienta “instrumental de la realidad para transformarla, y así adaptar nuestro entorno”8. Sí, adaptar nuestro entorno, y todo de una manera un tanto egoísta del hombre, como si el entorno entero estuviera ahí para que él mismo dispusiera de la manera que quisiera de todo. Si queremos modificar algo, una herramienta nos ayuda a hacerlo si no podemos hacerlo manual, y por eso “percibimos a la tecnología como un remedio infalible, como un poder capaz de reordenar el caos, de imprimir orden a la naturaleza y resolver nuestras ansiedades”9. Somos una especie que no se siente digna de adaptarse a su medio, sino que quiere adaptarlo a él, no nos basta con tantas cosas que el entorno nos da naturalmente, sino que usamos exprimidor (la tecnología) para sacarle más de lo que naturalmente nos brinda. Usamos técnicas diferentes que nos permitan moldear nuestro entorno a nuestro favor, y la técnica como dice Ortega y Gasset, “es lo contrario de la adaptación del sujeto al medio, puesto que es la adaptación del medio al sujeto”10, lo cual asegura inmediatamente, debe hacernos sospechar que esa es una manera de proceder opuesto a los procesos biológicos.

Ahora, hay un tipo de tecnología que Naief en su texto llama «alta tecnología»11, y con ella se refiere a “las tecnologías más recientes y novedosas, a las que ocupan un nivel más alto de desarrollo en determinada área y que también se denominan tecnologías de punta, de vanguardia o de última generación”12, a ella ya me he referido un poco cuando dije que generalmente siempre preferimos tener aquellos artefactos que más funciones nos ofrecen, y es así, porque son lo más novedoso, y por lo tanto, los más «útiles y atractivos».

La alta tecnología ciertamente, tal como asegura Naief, “suele llegar al mercado con una apariencia específica y atractiva: función y estilo van de la mano”13. Y es ahí cuando más se manifiesta la atracción por el objeto mismo más allá de su utilidad. Así se dan hoy en día las cosas cuando nos referimos a las tecnologías de la información, todas aquellas herramientas principalmente que necesitan para su uso redes WAN (Wide Area Network) o redes de área amplia, es decir, redes a que se conectan a todo el mundo o al menos a amplias partes de él, como lo son los diferentes servidores de Internet, pueden ser computadoras o celulares, entre otros artefactos que desconozco sus nombres.

Dice Naief,

la alta tecnología se presenta como deseable y sexi, es una combinación de función y apariencia y no es algo únicamente capaz de resolver problemas prácticos. Un producto de alta tecnología es, por lo menos por un tiempo un objeto valioso en sí mismo, es un símbolo de consumo, capitalismo y estatus que engendra una tecnomanía, una obsesión que no permite ver los problemas que eventualmente presentan las soluciones tecnológicas ni el verdadero costo de la sonambulización de la cultura. Esto se traduce en que perdemos de vista las implicaciones sociales, culturales, morales y políticas de las innovaciones tecnológicas, las que tendemos a ver como neutras e incluso inevitables14.

Y muy acertadamente, la alta tecnología tiene un valor en sí mismo, da estatus, ya que quien la obtiene es reconocido y distinguido entre los demás individuos en la mayoría de los grupos sociales. Las empresas generadoras de tecnologías buscan por ello, dar la mejor apariencia posible a sus productos, pues es un requerimiento importante a la hora que el usuario lo elige. Los usuarios por otro lado sufren una cierta costumbre a su uso que no se detienen a preguntarse las posibles consecuencias que se pudieran generar al actuar de esa manera respecto a los avances tecnológicos, y menos son capaces de pensar su vida sin ellos.

Cuando compramos una computadora por ejemplo, además del objeto físico también consideramos los programas con que la manejaremos. Bien, los instrumentos que utilizamos para informarnos, comunicarnos, trabajar, etc. digitalmente son hoy en día requerimientos básicos para llevar una vida «normal». Ciertamente estas tecnologías resuelven gran parte de nuestras tareas diarias, nos facilitan la vida de una manera impresionante. Pero por otro lado como ya se mencionó, esclavizan nuestras vidas, y según mis reflexiones, lo hacen más allá de su excesivo uso, sino que lo consiguen con el uso simple de ellas.

El software que utilizamos para una computadora, por ejemplo, hay de muchas variedades y para diferentes tareas y generalmente la mayoría de la población está familiarizada con software privado, de código cerrado. Un software es un programa informático que puede tener una o varias funciones específicas determinadas por un código, realizado a base de un lenguaje de programación el cual a su vez se conforma de operaciones lógicas-matemáticas, las cuales hacen funcionar ese software, y las cuales son determinadas por sus programadores, hasta donde sé, humanos.

Sin embargo, ese software, y me refiero al privado, al que la mayoría preferimos acceder, no suele mostrarnos todas sus funcionalidades. El programador puede, si así lo quiere, escribir secciones del programa que sean invisibles para el usuario. Es decir, generalmente nosotros adquirimos un software, un sistema operativo, por ejemplo, el cual nos sirve para poder organizar el resto de nuestros programas y nuestra información. Los sistemas operativos más utilizados son, Windows, MacOS, y Linux en sus diferentes distribuciones. Windows y MacOS son privados, y no permiten a los usuarios acceder al código fuente, es decir a la escritura del programa para ver y conocer sus funcionalidades. Ese secreto del ocultamiento de su código da a pensar que puede haber algo ahí escondido que, podría vigilar cada uno de nuestros movimientos cada vez que encendemos nuestra computadora, siempre, claro está, que estamos conectados a una WAN.

Los fines pueden ser distintos, como por ejemplo, comercializar con nuestra información, o sea, vender nuestros datos a otras empresas comerciales. De la misma manera pueden funcionar todo tipo de programas y utilidades de software privado, como los ejemplos que da Naief, Google entre ellos, el motor de busqueda por la web más utilizado hoy en día por los usuarios de Internet. Con esta herramienta nosotros podemos buscar en la red, lo queramos, todos nuestros intereses, es decir, tecleamos constantemente en una caja de diálogo que captura toda nuestra información y busca en las diferentes páginas web que existen en la red. Pero además, es muy probable, y no dudo que así sea, esa información que introducimos en la caja de texto es enviada a un servidor que almacena millones de datos, los cuales alguna otra utilidad tendrán, como venderlos a diferentes empresas comerciales. Saber qué es lo que la gente prefiere y busca no es de poco interés para el mercado, y de alguna manera servicios aparentemente gratuitos como los que ofrece google deben de ser sustentados.

Pero además del buscador, un sitio como google tiene un montón de servicios, como servidor de correo electrónico, chat, servicio de blog, un “ojo en el cielo”, como lo menciona Naief15, refiriendose a Google Earth, y algo que parece estarse adelantando más que el resto de los servicios, su red social Google+. Google está obteniendo bastante poder sobre sus usuarios, y ellos se lo están entregando tranquilamente, sin darse cuenta de lo que podrían ocasionar. Le entregamos nuestra información a google en muchos aspectos de nuestra vida con cada uno de sus servicios. Además de que conoce cada una de nuestras búsquedas, almacena nuestra correspondencia, nuestras conversaciones, nuestros intereses en general. Y además de vigilarnos virtualmente mediante todas estas herramientas, tiene ese ojo en en cielo con que puede vigilar los movimientos de acá abajo físicamente. Por otro lado, con esa herramienta que parece estar revolucionando, que es google+, parece que no nos podremos desprender de esa empresa. Es un mundo posible hecho realidad, el mundo virtual que los humanos hechos creado posiblemente con buenas intenciones, como ayudar al desarrollo de las sociedades; sin embargo poco hemos tenido en cuenta las consecuencias de su implementación de la manera en que se está haciendo.

Si Facebook, la red social más utilizada hoy parecía tener mucho poder, pues de igual manera a esta red solemos confiarle nuestra información personal, google con su arsenal de herramientas, pero principalmente con su red social que empieza a robarle aceleradamente los usuarios a Facebook se perfila a ser un verdadero imperio que dominará a sus usuarios sin que ellos se den cuenta o peor aún, sin que les importe o crean que les afecte. Facebook fue catalogado por muchos Hacktivistas16 y críticos como «el gran hermano de la realidad». Sí, el gran hermano como el descrito en la novela de George Orwell, una especie de ser invisible, pero inimaginablemente poderoso que vigilaba cada uno de los movimiento de todos sus súbditos. Esto porque de alguna manera Facebook así parece funcionar, pues almacena datos personales, gustos de todo tipo, estados de ánimo, e incluso muchos usuarios suelen decirle al Facebook cada una de las actividades que realizan a cada momento. Es decir, nosotros mismos le concedemos a la red social la información que necesita para vigilarnos. No nos miran a través de cámaras bien escondidas como en la novela, sino que cada uno de nosotros introducimos en la caja de texto lo que el gran hermano necesita saber, nosotros mismos nos sometemos a su vigilancia. Pero hoy parece que el control se le está yendo a Facebook de las manos, y lo acapara Google y su creciente red social. Parece inevitable, ya que como Naief lo refiere acertadamente:

Internet crea una atmósfera semejante a la de una secundaria en que ser como los demás es garantía de no ser marginado […] se caracteriza, paradójicamente, por producir en los cibernautas el efecto de la manada, por sembrar un desprecio por la autentica originalidad y por ridiculizar a la disidencia”17.

Así, cuando la manada comienza a mudarse al nuevo sitio, al que está de moda, al que puede referirse como la alta tecnología, el resto los sigue, ya que no es válido quedarse en lo que ya es historia, tal como encontramos muchos ejemplos en Tecnocultura de sitios que si en su tiempo fueron los más populares, las nuevas tecnologías los reemplazan y los usuarios se mudan a lo novedoso.

Estos sitios, controlados por software que parecen esconder muchas de sus funcionalidades, que me atrevería a decir, de las más importantes, intentan controlarlo todo, parecen querer convertirse en los amos de la vida de sus usuarios. Hoy mismo me he encontrado con una nueva noticia:

“Microsoft ha anunciado que si los fabricantes de ordenadores quieren distribuir sus productos con el logo de compatibilidad con Windows 8, deben implementar una medida llamada «arranque seguro». Arranque Seguro está diseñado para proteger contra malware previniendo que las computadoras carguen programas binarios no autorizados en el arranque. En la práctica, esto significa que los equipos que implenten esta característica no podrán arrancar sistemas operativos no autorizados — incluyendo los sistemas inicialmente autorizados que han sido modificados sin ser aprobado de nuevo.”18.

Una herramienta que no dista mucho de lo que ha venido haciendo la otra gran transnacional de las tecnologías de la información, MacOS, asegurando a sus usuarios a que sólo utilicen sus productos y nada ajeno a ellos.

Muchos usuarios de computadoras, principalmente interesados en las herramientas de información libres, cuando adquieren un equipo de cómputo, instalan más de un sistema operativo en un mismo ordenador. Lo más común es, un Windows y una distribución de un sistema libre, como Linux o FreeBSD. Generalmente con la intención de cambiarse definitivamente al software libre, pero continúan con una partición en su disco duro donde tienen Windows para cualquier emergencia, por si no saben como realizar alguna tarea en su sistema libre o por alguna incompatibilidad de software que llegaran a tener con alguna de sus amistades. Con esa medida, se corre el riesgo de que los usuarios ya no tengan la posibilidad de instalar en sus computadoras algo diferente de Windows. En los últimos años el software libre, principalmente Linux, le ha ganado mucho terreno a los sistemas privativos, es una situación que preocupa y alarma a los empresarios del software, por lo cual necesitan implementar nuevas medidas que contengan a sus usuarios utilizando sus productos, ya que de otra forma no perderían sólo sus ganancias económica, sino que perderían poder político al dejar de tener acceso a la información personal de los individuos si estos dejan de utilizar sus herramientas y programas.

Esta realidad resulta escalofriante, y más cuando me encuentro en Tecnocultura cuál es la propuesta de google para un futuro, la cual desconocía hasta ahora: “La propuesta de google es que en el futuro estaremos mejor si nuestro cerebro fuera aumentado o sustituido por un dispositivo de inteligencia artificial conectado permanentemente a Internet”19. Parecieran los planes para un control definitivo sobre los individuos, con lo cual ya no habrá manera de ser perdidos de vista ni un solo instante por el gran hermano.

Estas herramientas de las tecnologías de la información, como ya lo mencioné se aparecen ante el público aparentemente gratuitas, pero la manera en que se mantienen funcionando es vendiendo la información de sus usuarios al mercado, para que sepan que producir, es decir, todo aquello que ya saben que les vamos a comprar porque hemos indicado que «nos gustan, nos interesan y las buscamos a menudo». Ahí es donde nos damos cuenta que pagamos constantemente por el uso de todas esas utilidades.

En este contexto tenemos que Internet nos ha conferido un poder sin precedente sobre la información, pero a la vez nos ha convertido en sujetos permanentemente vigilados”20. Más hoy en día, que podemos contar con dispositivos móviles, y con redes inalámbricas gracias a las cuales podemos conectarnos a redes WAN en casi cualquier parte a donde vayamos. “La miniaturización de los accesorios tecnológicos de cómputo y comunicación nos convierte en seres monitoreados a perpetuidad y ningún elemento de nuestra vida privada está a salvo de los ojos y oídos electrónicos”21. Ya no necesitamos esperar a llegar a casa para contarle al mundo (o a nuestro distribuidor de software o servicio de comunicación) lo que nos ha pasado durante el día, lo podemos hacer al instante, cuando nos sucede, ya que contamos con las herramientas para hacerlo y actualizarlo a cada instante, es así de fácil contar hoy en día nuestras experiencias, es así de fácil ejercer el control sobre todo el conjunto de individuos y sociedades. Eso claro está, sin tomar en cuenta el resquebrajamiento del tejido social que esto provoca, ya que me doy cuenta constantemente, los usuarios de estas altas tecnologías, revisan sus dispositivos cada vez más a menudo, pues reciben sus notificaciones y no pueden evitar muchas veces esperar un momento adecuado para revisarla, prefieren interrumpir sus actividades, su trabajo, su estancia en la vida real, por atender lo que ocurre en el mundo virtual. Que estas tecnologías tengan una especie de adictivo no es mera coincidencia, es una necesidad de las mismas compañías para que el control sea más intenso. Esto hoy que estamos conectados casi todo el tiempo mediante pequeños dispositivos, y no es muy difícil imaginarse cómo serán las cosas una vez que la propuesta de Google llegara a realizarse, pues si hoy en día se pueden conocer nuestros estados de ánimo, nuestras experiencias diarias, nuestros intereses y deseos, etc., al tener los individuos un dispositivo integrado al cerebro o sustituyéndolo, incluso se podrá saber lo que hoy aún podemos ocultar al mundo, nuestros más profundos pensamientos que cuando nosotros lo decidimos, no los compartimos aún. Parece que compañías como google quieren saber incluso eso. Son medidas de control, incontroladas. Los intereses políticos y económicos parecen prevalecer ante todo, las ganancias monetarias son el motor de esos nuevos avances, y a los grandes empresarios no parece importarles, y seguramente ni siquiera se detienen a pensar en que incluso ellos son afectados por esa situación.

Los científicos, en este caso, los programadores e ingenieros de estas tecnologías parecen no detenerse a pensar y reflexionar sobre sus inventos. Ellos se plantean un determinado objetivo, y sólo se fijan en conseguirlo, sin importar el camino ni los resultados secundarios que ellos puedan presentar. Si el fin predeterminado se cumple, las implicaciones no tienen cabida en en análisis del problema. Esa es una característica que parece definir a la gran mayoría de los científicos, no sólo de esta área, sino todas las de la ciencia y tecnología. Todo, generalmente parece por el buen vivir de la humanidad, ya que como plantea Ortega Y Gasset, “el empeño del hombre por vivir, por estar en el mundo, es inseparable de su empeño de estar bien. Más aún: que vida significa para él no simple estar, sino bienestar”22. Y creemos generalmente que vivir bien significa tener todas esa comodidades que la tecnología nos ofrece, evitarnos todas esas fatigas y ahorrarnos un montón de calamidades que tal vez sufriríamos sin ella. Una de las definiciones respecto a esto que Ortega Y Gasset da es que “la técnica es el esfuerzo para ahorrar el esfuerzo, o dicho en otra forma, es lo que hacemos para evitar por completo, o en parte, los quehaceres que la circunstancia, primariamente nos impone”23. Por eso nos es tan fácil acostumbrarnos a usar tecnología, porque nos brinda muchas facilidades para nuestra vida.

Existen ciertamente también, una serie de alternativas a todas estas formas de control que algunos han implementado al darle a la tecnología la orientación que hasta aquí he descrito. Las herramientas libres, que ya he mencionado son un conjunto de programas que pretenden abolir la propiedad intelectual de los sistemas de información, permitiendo así la libertad de los usuarios para su uso, el software libre. “En concreto, el software libre implica que los usuarios tienen las cuatro libertades esenciales: (0) ejecutar el programa, (1) estudiar y modificar el programa desde el código fuente, (2) redistribuir copias exactas y (3) distribuir versiones modificadas”24. Es decir, los usuarios de software libre pueden conocer con certeza, con un poco de conocimientos informáticos cada una de las funciones de los programas que utiliza. Estas herramientas son generalmente hechas por comunidades enteras de los mismos usuarios, a los cuales puede colaborar cualquiera que se interese. Son proyectos que apuntan a la construcción de herramientas colectivas, en vez de privadas.

Ciertamente el software libre no es muy conocido por los usuarios de las tecnologías, ya que no cuenta con un sistema de comercialización como el software privado, del cual el comercio es su función principal. El software libre no tiene como patrocinadoras a las grandes empresas comerciales, pues este no vende la información de los usuarios para obtener a cambio publicidad, sin embargo, se ha demostrado con bastantes experiencias que su funcionamiento y rendimiento es muy superior a los sistemas privados.

Claro está que las empresas del software buscan eliminar estos fenómenos colectivos de crear herramientas, ya que son formas de vida que atentan en contra de sus intereses económicos. Pero grandes comunidades de hacktivistas están constantemente trabajando por difundir de manera autónoma estas herramientas, y sus esfuerzos parecen trascender. Por algo las corporaciones privadas están tomando medidas de emergencia para tratar de frenar esta migración de usuarios, intentando obligarlos a no usar otra cosa que no sean sus productos.

Esto claramente significa que la tecnología no necesariamente tiene por qué ser un medio de control para la vida, sino que puede por el contrario crear comunidades autónomas donde el poder lo ejerzan cada uno de los usuarios en vez de ser controlador por algunos cuantos creadores y únicos conocedores de los sistemas tecnológicos. La tecnología entonces, podemos decir, no es el problema en sí mismo, el problema es la orientación que solemos darle, la manera en que la usamos.

Si por un lado ciertamente la tecnología utilizada de un modo racionalizado, pues nos esclaviza por una parte, pero aumenta nuestra productividad y nuestro ocio por otra y por ello la aceptamos y reconocemos como necesaria, puede llegar a ser en sí mismo una ideología, como analiza Habermas25, en la cual, “no sólo su aplicación sino que ya la técnica misma es dominio sobre la naturaleza y sobre los hombres: un dominio metódico, científico, calculado y calculante”26, también la podemos racionalizar de un modo que nos beneficie verdaderamente en vez de controlarnos. Mientras que los poderosos mecanismos privatizados de la tecnología intensifican su dominio, tratando de legitimarmás el poder político de las corporaciones, pues “la tecnología proporciona también la gran racionalización de la falta de libertad del hombre y demuestra la imposibilidad técnica de la realización de la autonomía, de la capacidad de decisión sobre la propia vida”27, otra comunidad de individuos tratan de abrir la brecha que conduzca a los individuos a ser a pesar de todo, aún autónomos, con tecnologías que ayuden sí a las tareas y actividades diarias, pero de una manera controlada por los usuarios, y no de una manera que los individuos sean controlador por la tecnología.

La tecnología se utiliza como una ideología porque es vendida la idea de que su uso es totalmente elemental y necesario, y al adoptarla la reconocemos como tal desde un inicio, y la aceptamos de la manera en que se nos impone, sin representarnos ni pensar en formas distintas de tratarla o juzgarla. Se nos presenta generalmente apuntando a ciertos fines, fines que representan el control y el capitalismo dominante, pues intereses económicos son los que desde un principio rigen su desarrollo. En el momento en que los usuarios detengan un momento su referencia a sus dispositivos tecnológicos y razonen por sí mismos la tecnocultura en la que se han zambullido, en vez de aceptar su uso ya racionalizado por otros, que lo hacen a partir de sus propios intereses y no los del usuario, entonces la tecnología parará a ser un verdadero servicio para el desarrollo de las sociedades en vez de serlo únicamente para un pequeño grupo de individuos.

1Yehya Naief, Tecnocultura. El espacio íntimo transformado en tiempos de paz y de guerra, Tusquets, 2008.

2Ídem.

3Ibídem, p. 13.

4Ídem.

5Ibídem, p. 14.

6Ídem.

7Ídem.

8Ibídem, p. 15.

9Ídem.

10Ortega Y Gasset, José, Meditación sobre la técnica, Madrid, ESPASA-CALPE, 1965, p. 23.

11Ob. Cit, Nota 1, p. 17.

12Ídem.

13Ibídem, p. 18.

14Ídem.

15Ibídem, p. 119.

16Personas comprometidas con el activismo político en el ciberespacio, es decir, utilizan herramientas informáticas para manifestar inconformidad o crear tecnologías de información alternativas, contraponiéndose a los sistemas comerciales que buscan el control de los usuarios.

17Ibídem, pp. 20-21.

18Noticia que circula en Diaspora, red social libre.

19Ibídem, p. 123.

20Ibídem, p. 23.

21Ídem.

22Ob. Cit., Nota 9, p. 26.

23Ibídem, p. 35.

25Habermas, Jürgen, Ciencia y Técnica como ideología, España, Tecnos, 2001, p. 54.

26Ídem.

27Ibídem, p. 58.

Recuperar la función de la tecla Impr Pant después de instalar Compiz

8 diciembre, 2012

Hace varios días instalé Compiz, y tuve el problema de que al querer utilizar Impr Pant para tener una rápida captura de mi escritorio, la tecla no funcionaba, pues compiz configuraba otra combinación de teclas para semejante acción.

Como estoy acostumbrado a utilizar la tecla ya referida y determinada a eso por Gnome, me di a la tarea de buscar como volver a hacerlo así sin desabilitar compiz, y la solución es muy sencilla. Sólo hay que entrar a la configuración de Compiz, y en la pestaña «General» marcar la opción «Compatibilidad de Gnome», y listo.

Pantallazo-Administrador de Opciones CompizConfig

Solucionar problema de webcam en Skype en Debian

7 diciembre, 2012

Cuando instale Skype en Debian, a pesar de que me detectaba la webcam sin mayor problema, la imagen aparecía negra. Este video que encontré en youtube me solucionó el problema, para debian Squeeze. Sin embargo cuando actualicé a Wheeze tuve que cambiar algunas cosas.

Nos movemos a Sistema de Archivos/usr/share/applications/

Ahí buscamos la aplicación de Skype, y con el click secundario de mause, le damos en la opción Copiar y pegamos la copia en Escritorio

Ahora nos vamos al escritorio, y en la copia que hemos hecho, con el botón secundario del mause, seleccionamos propiedades. En la caja de texto para el comando debe de quedar así para Squeeze:  env LD_PRELOAD=/usr/lib/libv4l/v4l1compat.so skype

En Wheeze debe de quedar así: env LD_PRELOAD=/usr/lib/i386-linux-gnu/libv4l/v4l1compat.so skype

Guardamos y listo, entramos a Skype desde esa copia que hemos creado y editado y la cámara funciona.

Computadoras con Linux instalado de fábrica

17 julio, 2012

Texa es una empresa que comercializa equipo de computo en los cuales ofrece un sistema operativo alternativo a los que la mayoría de los usuarios están acostumbrados. Texa ofrece Linux instalado de fábrica en las computadoras que comercializa. Sin duda esto es un aporte muy importante por parte de esta empresa, ya que el resto de las empresas sólo ofrece Windows en sus productos, imponiendo este último sistema como un monopolio que además de su mediocre funcionamiento, es un software que encadena a los usuarios a utilizar únicamente software privativo.

Además, seguramente al adquirir productos con software libre instalado de fábrica, seguramente éste podrá ser adquirido en un precio más bajo, pero eso dependerá de la distribución, aunque sabemos que muchas las podemos conseguir gratuitamente.

Pero principalmente se esta rompiendo ese muro en el mercado que no permitía al usuario una alternativa a Windows, por lo cual, muchos no conocen más que ese sistema, no tanto porque sea mejor, sino precisamente porque es el único que podíamos encontrar en las computadoras que el mercado ofrecía. Hoy tenemos esta alternativa, sólo falta perder el miedo a lo desconocido. La mayoría de las distribuciones Linux son muy fáciles de usar y tienen un rendimiento excelente. Vale la pena probarlo, si estás interesado en adquirir un equipo de cómputo y te interesa conocer Linux, ya hay la opción de comprar la computadora con el sistema Linux instalado.

Es importante difundir esta información, ya es suficiente de seguir enriqueciendo a una transnacional como Microsof que lucra con nuestra información personal y con nuestra Libertad ¡Viva GNU/Linux! A correr la voz.

Esta es la dirección de TEXA: http://www.texa.com.mx/

Instalar HP DESKJET 3050 ALL-IN-ONE j610 SERIES en Debian

30 diciembre, 2011

* Este procedimiento lo he probado tanto en Squeeze como en Wheezy y en ambos va bien.

Hace poco compré una impresora de dicha marca y modelo y me sucedió lo que nunca me había sucedido con impresoras en Debian, tuve problemas para la instalación.

Resulta que el hplip que instala por defecto Squeeze no contiene el controlador de este modelo, por lo que fue necesario descargarlo de la página oficial de hp.

Al instalarlo,  ya podía agregar la impresora con su controlador, pero seguía teniendo problemas. Aunque el sistema me detectaba la impresora, al enviar un trabajo nadamas no lo imprimía.

Buscando por la red, encontré que lo que me solucionó el problema fue lo siguiente:

Antes de instalar el controlador hay que hacer esto:

Como root, hay que ir a /usr/lib/cups/filter, y al archivo foomatic-rip, hay que hacerle una copia cambiendole el nombre (a la copia), por foomatic-rip-hplip, y después, hacerle a éste último un enlace en el directorio /usr/bin

Y entonces sí, instalar el software que hemos descargado: (en el mismo link hay un tutorial detallado para la instalación del software).

Nos dirigimos al directorio en que lo hemos descargado:

# cd Desktop/

E instalamos:

# sh hplip-3.11.10.run

Durante la instalación es necesario para detectar la impresora reiniciar el equipo o desconectar y volver a conectarla. el proceso mismo pregunta cuál opción es preferible, en mi caso elegí  deconectar, que es la opción más sencilla y después de un par de minutos de instalación, ya tenía mi equipo funcionando correctamente, tanto impresora como escaner. 🙂